❗️Para poder utilizar Verkami debes hacerlo desde otro navegador. Instala o entra desde: Microsoft Edge, Chrome o Firefox. Microsoft ha dejado de actualizar el navegador Internet Explorer que estás utilizando y ha dejado de ser compatible con la mayoría de sitios web.

Ceuta, dulce prisión

Este documental relata el encierro sufrido por Marius, Simon, Iqbal y Hakim, apresados en el enclave de Ceuta desde hace años mientras intentan por todos los medios llegar a Europa, como miles de otros migrantes.

Zaradoc

Un proyecto de

Categoría

Creado en

0
segundos
4
Aportaciones
135€
De 2.000€
Aporta al proyecto

Escoge tu recompensa

O apóyalo con una donación

Aporta sin recompensa
Haz una donación altruista al proyecto sin recibir ninguna recompensa a cambio:

SINOPSISEste documental relata el encerramiento sufrido por Marius, Simon, Iqbal y Hakim, encerrados en el enclave de Ceuta desde hace varios meses, como centenas de otros migrantes. Entre tragedias y alegrías cotidianas, esta película describe la desgracia y las ínfimas esperanzas de hombres presos en las redes de un sistema financiado por cada ciudadano europeo.¿PARA QUÉ NECESITAMOS LOS 2.000€?Los fondos recolectados esencialmente servirán para financiar la post-producción de la película: montaje, mezcla de sonidos y etalonage, cerca de 1500 euros.Por otra parte, este dinero servirá para hacer vivir la película, una vez acabada: envío a los festivales, organización de proyecciones y debates y colaboraciones con organizaciones de ayuda a los migrantes con el fin de sensibilizar y hacer reaccionar al mayor público posible para sensibilizar sobre este gran problema de nuestra época. Cerca de 500 euros.CEUTA, DULCE PRISIÓN"Ceuta, dulce prisión" retrata la condición de varios jóvenes en las grandes problemáticas actuales de la inmigración. Iqbal el indio, Hakim el nigeriano, y Simon y Mario ambos chadianos, dejaron todo para probar fortuna en Europa. Después de un viaje de varios años, se encuentran atrapados a las puertas de Europa, en el enclave español de Ceuta, en el norte de Marruecos. Como ellos, numerosos exiliados aterrizan allí, entre tierra y mar, entre dos continentes, entre dos destinos. Se topan cada día con la pared inmensa de Ceuta de un lado, con el Mediterráneo del otro.ENFOQUEEsta película tiene la vocación de relatar la espera claustrofóbica de hombres sometidos al suplicio permanente de tener Europa frente a ellos y al riesgo permanente de una exclusión. También esta destinado a revelar la existencia de la Valla, muro de alambre, ancho, inmenso, vigilado por enormes medidas de seguridad. Una pared de hierro que traza una frontera violenta entre Europa y África. Una pared física y administrativa, edificada por la Unión Europea, financiada por sus ciudadanos, sin que estos últimos sean conscientes de todo ello.Desde el principio, nuestra idea era ir al encuentro de estos migrantes presos entre dos mundos. La cuestión del muro de Ceuta y del encierro inmediatamente nos pareció fundamental. El enclave de Ceuta era pues el punto de partida ideal para relatar el cierre progresivo de Europa y mostrar esta separación siempre compleja entre Norte y Sur. Ceuta muestra temáticas que a nuestro modo de ver son las más notables de nuestra época. Cuanto más tiempo pasa, más urgente nos parece  describir esta situación de Europa y la cuestión de la inmigración y del encierro a partir de este punto geográfico, desde esta zona "ni dentro, ni fuera", demasiado a menudo silenciada.En el transcurso de los encuentros y las historias que oíamos, nos dábamos cuenta de la atrocidad causada por estos viajes y por esta subsiguiente realidad de encierro tan cruel, una vez alcanzada Ceuta. Así Simon y Marius nos hablaron de largos meses de clandestinidad en los bosques de Marruecos, viviendo con el temor a ser, como otros antes, molidos de golpes y luego abandonados en el desierto por la policía marroquí. O Iqbal, encerrado durante meses en un contenedor de barco, antes de llegar a países de lenguas desconocidas que hoy le cuesta recordar. Y por fin Hakim, describiéndonos marchas interminables en el desierto entre Níger y Argelia, evocando con pudor la memoria de varios de sus compañeros de fatigas que dejaron allí la vida.   Si acabaron por conseguir entrar en el enclave después de numerosas tentativas infructuosas, es para superar finalmente la última barrera, ese endiablado espacio Schengen. Viviendo hoy en condiciones deplorables, siendo sometidos a una presión continua que llaman "la tortura mental de Ceuta", son los testigos privilegiados, a pesar de ellos, de esta Europa que quebranta esperanzas y vidas.Titulamos así nuestro proyecto documental "Ceuta, prisión dulce". El diario de Marius, Simon, Iqbal y Hakim y de miles de jóvenes encerrados a cielo abierto, en una ciudad costera militarizada. Las condiciones de vida de estos emigrantes son desastrosas. Que vivan en un campamento improvisado, desafiando a la insalubridad y las inclemencias o en el centro de retención, siendo hacinados diez por cuarto, donde hay que intentar conciliar los desacuerdos tanto como sea posible - sin un verdadero lenguaje común - todos ellos se enfrentan con un día a día repetitivo, penoso y fatigante. Una rutina que nos evoca las condiciones de la vida  carcelaria. Impedidos del derecho a trabajar, cada uno sobrevive como puede: -Simon, 23 años, intenta a duras penas dar con uno de estos sitios privilegiados para migrantes, aparcando y lavando los coches de los Ceutís, a menudo a cambio de algunos céntimos. -Mario, 28 años, es uno a los que le va mejor, gracias a pequeñas limosnas de la iglesia. Tres veces por semana, se embolsa diez euros por una mañana de trabajo. -Iqbal, 19 años, pasa todos sus días delante de un supermercado, contentándose con llevar las compras de los clientes esperando una retribución modesta. -Hakim, 25 años, sobrevive gracias a envíos monetarios regulares de su hermano instalado en los Estados Unidos.El resto del tiempo, yerran por la ciudad, se sientan alrededor del CETI y se entregan a veces incluso a la bebida, esperando noticias en cuanto a su suerte jurídica.Pequeñas alegrías en situaciones desesperadas. Nos gustarían mostrar y humanizar la vida cotidiana de varios jóvenes de nuestra edad con la pequeña esperanza y la modesta ambición de que esta película, todavía en proceso, pueda influir de manera positiva sobre la vida de millares de migrantes que caen física y moralmente en las entrañas de las políticas migratorias de la Unión Europea.LOS REALIZADORESJonathan Millet tiene 26 años. Siempre se intereso por la imagen. Hoy es realizador de cortometrajes y documentales. Principalmente se interesa por los temas sobre política, fronteras y migración. Tan pronto como tiene la posibilidad, se va varios meses a países lejanos de colores y luces increíbles. Con su cámara, atravesó Irán, Uganda, Siria, Paraguay, Bangladesh, Sudán, Paquistán, Mozambique, Nepal, Malawi, Líbano, la India, Perú, Israel, Senegal...Loïc H. Rechi es periodista independiente. Su atracción hacia los universos paralelos lo hizo investigar sobre la vida nocturna en Shanghaï, la juventud islandesa, los sin hogar de Nueva York así como otros temas sociales sobre Francia como los skinheads arrepentidos, los cazadores de ovnis o los fanáticos a las carreras de caballos. Colabora hoy con Slate.fr, Snatch Magazine, Owni.fr y creó el sitio abstracto - concret.com.

Preguntas frecuentes

Aún no hay ninguna publicada.

¿Tienes alguna otra duda o pregunta?

Pregunta al autor/a

1 comentario

Si ya eres mecenas, Inicia sesión para comentar.

  • Daniel H.

    Daniel H.

    casi 12 años

    Hola

    Estoy lanzando una campaña de apoyo a proyectos interesantes para que puedan ser grabados en máxima calidad con las nuevas RED SCARLET-X

    http://danielhernandezaudiovisual.blogspot.com.es/p/red-scarlet-x.html

    Ánimo con vuestro proyecto!

Utilizamos cookies propias esenciales para poder ofrecer nuestro servicio y de terceros para poder conocer el uso de la página. Política de cookies